Desde hace ya décadas, las energías renovables han estado en el centro del debate del sector energético. Sus beneficios han supuesto toda una revolución dentro del mercado. En este sentido, la energía solar ha sido una de las más valoradas, y más en nuestro país, uno de los que cuenta con más horas de sol en todo el año.
Sin embargo, diferentes normativas como la conocida como el “impuesto al sol” frenaron en seco el autoconsumo solar. Tras su derogación, un nuevo espaldarazo supuso que se convirtiera en la tercera energía renovable en España, por detrás de la eólica y la hidráulica.
Ahora, con la incesante subida de la luz, se ha recobrado el interés del autoconsumo fotovoltaico. Algo normal, puesto que el coste de este tipo de instalaciones asi como el período de amortización de las mismas se ha reducid drásticamente.
Si todavía estás un poco “verde” en lo que es el autoconsumo fotovoltaico o los tipos que puedes encontrar, en este artículo te lo vamos a explicar detenidamente, ¡permanece atento!
¿Qué es el Autoconsumo Fotovoltaico?
El autoconsumo fotovoltaico corresponde a la producción individualizada o colectiva de electricidad, por medio de paneles solares fotovoltaicos, para su propio consumo.
Como hemos comentado antes, es muy lógico aprovechar la energía solar, puesto que en nuestro país contamos, de media, con unos 300 días de sol al año, lo que implica contar con esta energía limpia prácticamente todo el año.
Otro de los beneficios del uso de la energía solar fotovoltaica en nuestro país es su excelente rendimiento, gracias a nuestra ubicación geográfica, está la irradiación solar, la cual incide de forma más que notable.
Tipos de Autoconsumo Solar Fotovoltaico
En función de quién haga uso del autoconsumo y de la forma en la que se utilice, se pueden definir diferentes tipos de autoconsumo solar fotovoltaico, ¡los vemos a continuación!
Autoconsumo Fotovoltaico, según el Destinatario
Tanto la regulación, como el tipo de instalación y necesidades de la misma pueden variar enormemente, según quién vaya a emplearla. Por ejemplo, una instalación no va a ser igual si es para el autoconsumo de una empresa o de uso residencial, ni en equipamiento, ni en redimensionamiento, como es lógico.
Dada nuestra contrastada experiencia en el autoconsumo solar fotovoltaico, en AMB Green Power lo dividimos en tres usos distintos: autoconsumo industrial, autoconsumo agrícola y autoconsumo residencial.
Autoconsumo de Conexión -o no- a la Red
Las instalaciones eléctricas de cualquier edificio están conectadas, como es lógico, a la red. En el caso de las instalaciones fotovoltaicas, suele ser también lo habitual, puesto que necesitan de suministro, en el caso de que la procedente de las placas no sea suficiente. En este tipo de casos, hablamos de instalaciones conectadas a red.
También están las instalaciones de autoconsumo aisladas de la red, las cuales incluyen baterías para almacenar la energía, este tipo de instalaciones se utilizan cuando no hay red eléctrica convencional.
Autoconsumo con o sin Excedentes
A la hora de hablar de la producción fotovoltaica, otro aspecto a tener en cuenta es que el autoconsumo sea con o sin excedentes. Cuando se habla de autoconsumo con compensación por excedentes, hablamos de una instalación en la que la energía sobrante se vierte a la red eléctrica, recibiendo una compensación en la factura de la luz o incluso pudiéndose vender al mercado mayorista. Os hablamos detenidamente de ello en este post.
En el caso de que sea una instalación sin excedentes a la red eléctrica, puede que sea porque tiene sistema anti vertido o almacene la energía producida en una batería, como en el caso de instalaciones aisladas que hemos comentado antes. Este tipo de instalaciones (sistema sin vertido a red) se suelen hacer en industrias con un consumo elevado y estables durante todo el año.
Uso Individual o Compartido
Normalmente, una instalación de autoconsumo es para solo un titular de un suministro eléctrico. Por ejemplo, una empresa tiene una instalación de autoconsumo y la energía que recibe o la que vierte depende solo de ella. Por lo tanto, hablamos de una instalación de autoconsumo individual.
Sin embargo y, sobre todo, en lo que atañe en el consumo residencial, puede darse el caso de que una sola instalación genere para a varios hogares con consumos diferentes, como sucedería en una comunidad de propietarios. En este caso, hablamos de autoconsumo compartido.
Como puedes ver, el autoconsumo fotovoltaico ofrece múltiples soluciones para conseguir un ahorro energético amortizable en muy poco tiempo.
